Pasillo solitario

Ir a la enfermería es una escusa perfecta para saltarse clases. "Profesara, no me encuentro bien" "Pues pásate por la enfermería a que te miren"... Aunque siempre ha de ser utilizada sin excederse, pues de lo contrario acaban por sospechar.

Y hoy es otro día de esos en los que al no soportar más la clases, he usado el comodín de la enfermería. Me dirijo hacia la puerta, cuando al final de pasillo veo un chico sentado en el suelo, escribiendo algo. Le reconozco, es el chico que vino el otro día al café y se dio cuenta de mi verdadera personalidad. Shiroe-me, si mal no recuerdo.
Voy corriendo alegremente hacia él, ¡por fín voy a dejar de aburrirme!

-¡Holaaaa! ¿Te acuerdas de mi?
Le digo en voz bien alta, para que me escuche a través de los cacos de música

Levanto la mirada con un poco de parsimonia y veo los ojos de la chica del Café Maid.
-Hola, si, ¿que tal?, ¿que haces aquí?, ¿no deberías tener clases?
Digo tranquilamente mientras arrugo mi ejercicio de armonía. lo meto en la mochila y me quito los cascos.

-Esto sí... es que como soy tan lista que no necesito ir a clase - le giño un ojo - eso y que me aburría tanto que he dicho que me encontraba mal para ir a la enfermería para airearme un poco. ¿Y tú? ¿no deberías estar también en clase?

Me siento enfrente de él, apoyada en la otra pared del pasillo

-Si.... pero... esque .... estoy muy.... enfermo- guiño un ojo- y tengo cosas que hacer que me apetecen mas.... y además no esque la clase de matemáticas sea mi fuerte... ¿como llevas lo del café?

Me cae bien, es una de las primeras personas que me pregunta una cosa y no es :" ¿por qué eres tan raro?

-Je, pues creo que bastante bien, me parece que ahora lo mio va a ser el teatro, me esta resultando bastante divertido y todo. A ver si te pasas otro día, que ya me he aprendido la carta - sonrio - Por cierto, me he fijado que en ese papel estabas escribiendo como unas notas, ¿eres músico?

-Si, o al menos eso intento, pero no se.... las aglomeraciones son demasiado ruido... me desconcentro. Me alegro de que lo lleves bien, ya me pasaré.

Este chico que cae bien, no es como otros chicos, es diferente y eso me gusta.
En ese momento suena la campana de final de clase
-Oh, creo que tengo que volver, para recoger mis cosas y eso, por que ahora nos toca cambiar de clase. Supongo que nos volveres o a ver más ¿no?

-Posiblemente. Ahora yo también toca ir a clase. Nos veremos por los pasillos.

Que maja, ciertamente espero volvernos a ver, ya iré al café.

Nos despidimos y me voy para mi clase. Ojalá pudiera haberme quedado un rato más...